Google es único, es disruptor en todo lo que hace, el Pixel 3 es un claro reflejo de ello. Muchos dicen que Google crea este teléfono con la idea de demostrar al resto de fabricantes lo que Android es capaz de hacer. Y vaya si lo ha conseguido. Google no deja de ser un fabricante de software, no de hardware, y tenemos que considerar el Pixel 3 como triunfo del software sobre la máquina.

Google a diferencia del resto de fabricantes de móviles de gama alta no ha querido aumentar el número de cámaras del teléfono, ni la resolución y permanece con la misma que la del Google Pixel 2, 12 megapíxeles y f/1.8. Con ello lo que quiere probar es que sólo con software, es capaz de obtener las mejores fotos del mercado y que no es cuestión de sumar cámaras, sino de afinar el software que procesa las imágenes. Igual que hacen los vehículos de la NASA en Marte.

El resultado es inmejorable, al nivel, si no mejor, que el resto de cámaras actuales en teléfonos móviles. Obviamente falla en algunos aspectos, como en el zoom que no puede hacer frente a un teleobjetivo como el del Huawei P20 Pro.

La cámara frontal sí que ha recibido modificaciones, pasando a tener una doble lente que, en palabras de Google, te hará olvidar el palo selfie en casa, ya que la imagen frontal puede lograr hasta un 184% más amplitud, que con una cámara clásica.

El Pixel 2 tubo problemas con la pantalla, ya que al poco tiempo de uso empezaba a emitir unos tonos azulados. De momento la pantalla de 6,3 pulgadas del XL, y resolución QuadHD + con paneles OLED, tiene un balance correcto de blancos, y se ve perfectamente.

El procesador del Pixel 3 es un Snapdragon 845, el que equipan la inmensa mayoría de móviles de alta gama este año. Nada especial. La batería es de 3.430 mAh, más que suficiente para aguantar un día completo gracias a la excelente gestión de batería de Google.

Google mantiene la misma línea de diseño del Pixel 2 como seña de identidad. Mucho se ha hablado del enorme notch de la pantalla donde se encuentran las dos cámaras y el micrófono, que a simple vista sí que puede parecer algo desproporcionado, pero que a la larga pasa totalmente desapercibido.

Pixel 3 además incluye elementos de Android sólo disponibles para este teléfono, pero que llegarán al resto con el tiempo. Lo que no hay ninguna duda es que es y será siempre, la mejor integración de Android OS en un teléfono móvil.